El Licenciado Francisco Ortiz Reyes fue un hombre amable, alegre, positivo y muy simpático.
Nació un 4 de octubre de 1945 en la Ciudad de México. Decidió estudiar la Licenciatura en Administración en la Universidad Autónoma de Guadalajara y posteriormente también cursó la Maestría en Administración.
Desde entonces, hizo a la UAG su vida, ya que laboró por más de 50 años en esta institución, a la que siempre le tuvo un gran cariño, admiración y respeto.
Lo que más le gustaba de su trabajo era su sentido de trascendencia y se sentía muy satisfecho de trabajar para una institución que forma muchos jóvenes con valores e ideales.
Además de su trabajo en esta institución, también emprendió varios negocios como una carpintería y una empresa de limpieza y fumigación.
Aunque en su labor diaria tenía muchas ocupaciones, siempre se daba un tiempo libre para convivir con su familia, de hecho, a todos los hijos los llevaba a la escuela, comía todos los días con ellos y llegaba antes de que sus hijos se durmieran para darles las buenas noches.
Un hombre sencillo, optimista, generoso, alegre y de convicciones, se casó con su esposa Guadalupe Lozano en 1971, con quien procreó una gran familia de 7 hijos: Ale, Paco, Fer, Álvaro, Javi, Edi y Juan Pablo.
Con sus hijos siempre fue un padre protector, su superhéroe y ejemplo excepcional de fe, entrega y amor. Su principal preocupación era siempre cuidar de su esposa.
El Licenciado Francisco Ortiz Reyes fue un hombre siempre optimista, a quien le gustaba mucho correr, les encantaba conocer pueblitos, disfrutar de la naturaleza y caminar de la mano con su esposa.